Miguel Franco

A 30 Años de su Fallecimiento

[07/08/2019] Para recordar a Don Miguel Franco, creador del programa radial “Un Alto en la Huella”, reproducimos una nota de la Payadora Marta Susana Schwindt:

“Se llamaba Nedo Miguel Bearzotti Franco y era nacido en Carlos Pellegrini, Provincia de Santa Fé, el 7 de Marzo de 1922, pero para sus paisanos era ‘Miguelito Franco’.
“Lo conocí en 1967, cuando en Radio Argentina, dirigía su programa ‘Un alto en la Huella’ con libretos de ‘El Vasco’ Víctor Abel Giménez, audición fundada en 1947 que el ‘gringo’ mantuvo en el aire por más de 40 años, y a la que llegamos con el Chinito Güida y Julio Tomisaki siendo niños.
“La voz paisana e inconfundible de Miguel acompañaba los atardeceres de la gente de trabajo, que en el campo y en la ciudad, hacían ruedas de mate para escucharlo.
“Por sus programas desfilaron los más grandes folkloristas, cantores, recitadores y payadores. Recuerdo ‘Las mateadas con yerba La Hoja’, programa auspiciado por dicha marca de yerba, en el que compartía la conducción con la inolvidable Isabelita Marconi y el ‘gallego’ Luis Rodriguez Armesto, fueron también locutores de sus programas Ricardo Basalo y ‘El Yacaré’ Molina, y Luisito Tasser y Don Ascencio Hiquis sus más cercanos colaboradores.
“Grabó junto a José Curbelo y Roberto Ayrala obras que perpetuaron su recuerdo.
“Junto a Don Orlando Gargiulo y Victor Abel Giménez, dirigió ‘A Lonja y Guitarra’ un espectáculo de jineteada y canto que movía multitudes en Balcarce, Lobos, Cañuelas, Vicente Casares, Puente 12 y otras localidades.
“Además estuvo al frente de otros programas como, ‘Pago y Suburbio’ y ‘Chispazos de Tradición’.
“Miguel Franco, patriarca de los difusores criollos, falleció en Buenos Aires un frío 7 de Agosto de 1989, descansa -junto a su esposa Blanca- en el Círculo Criollo El Rodeo de Puente Márquez. Su recuerdo sigue vivo en el alma de sus paisanos y en el corazón de quienes fuimos sus amigos.”

Miguel Franco fue un gran difusor de las actividades de “El Rodeo” y “Fito” tenía una columna en su programa los días martes. Organizó en nuestro predio fiestas inolvidables como aquella en nuestra actual casa en la que entraron 17.000 personas.
Su hijo donó al Museo una parte de la colección de recuerdos de Miguel, que se encuentran en una vitrina.
Sus cenizas, junto a las de su esposa, descansan en un monumento en el jardín de la Capilla Criolla.
Lo recordamos con una foto del ombú que en una oportunidad Miguel plantó en "El Rodeo".